En qué consiste: es, relativamente, un novedoso concepto de consulta en nuestro país, que supone realizar ésta mientras hablamos y caminamos por la playa, por un parque, en una cafetería, etc.
En definitiva, cuando lo hacemos en algún espacio agradable y tranquilo, paseando o sentados al aire libre, aprovechando, en nuestro caso, el estupendo clima que ofrece la ciudad de Málaga durante todo el año.
A quién va dirigida: especialmente a aquellas personas que sufren estados de estrés o ansiedad, desánimo, insomnio, baja autoestima o malestar y que buscan ayuda profesional, pero que les cuesta más acudir a la consulta convencional por timidez, vergüenza, pundonor, o porque rechazan perrnanecer en sitios cerrados o les resulta embarazoso coincidir con otras personas. En otros casos es útil para evitar trasladarse y/o para tener mayor accesibilidad. También este tipo de terapia es recomendable para determinadas alteraciones psicológicas o cuando se hace necesaria la observación directa en el entorno habitual o natural de la persona, o cuando se necesitan cambios positivos en el estilo de vida, o en el transcurso de toma de decisiones o solución de problemas, etc.
En general todos podríamos obtener importantes beneficios de esta forma de intervención psicológica
Objetivos: no tener que esperar, ahorrar tiempo, enlazar los efectos cardio-saludables sanos de andar y los de la propia terapia, sentirse más relajado, tranquilo, estimulado y confiado durante la "conversación" y no relacionar la consulta con la idea, aún hoy lamentablemente algo estigmatizada, de ir al psicólogo.
Rosalía Maggi
Psicóloga